La ficción, el amor y la muerte* (I parte)
El teatro posibilita exponer en la escena, a través de las acciones dramáticas, los profundos conflictos existenciales irresueltos.
No obstante, a pesar de los intentos artísticos de organizar discursivamente las caóticas energías pulsionales, que habitan en las profundidades del Ser, siempre insiste un “resto real” no pasible de simbolización, que perdura como causa de constantes y renovadas producciones creativas.